Cuando llega el frío, tu piel cambia… y no es casualidad.
El invierno no solo trae bufandas y estufas: también piel tirante, roja, agrietada.
El frío, el viento, la calefacción… todo reseca y altera la barrera cutánea.
Y si tienes piel sensible, atópica, dermatitis o rosácea, sabes lo difícil que se vuelve esta época.
Pero el alivio real no es solo para el invierno.
Muchas personas con piel atópica han logrado reducir el uso de corticoides gracias a esta emulsión.
Porque sí: hay otra forma de acompañar tu piel.
“Mi piel se partía y ardía cada invierno, incluso usando productos de farmacia.
Esta fue la primera vez que algo me calmó de verdad.
La uso en la cara y en las manos, y es como envolverme en suavidad.
No la cambio por nada.”
— Daniela, 37 años
“Usé corticoides por más de 20 años. Nunca pensé que podría dejarlos, hasta que probé esta emulsión.
Por primera vez, sentí alivio sin ardor, sin rebote, sin miedo.
Hoy mi piel está más fuerte, y yo también.”
— Testimonio real
Por eso creamos una fórmula que no tapa, no arde y no irrita.
Solo calma, hidrata y repara desde el primer uso.
🌿 ¿Qué hace por tu piel?
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Calma la irritación, enrojecimiento y picazón
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Repara grietas, brotes y zonas descamadas
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Hidrata en profundidad sin dejar residuos pesados
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Fortalece la barrera cutánea y ayuda a espaciar el uso de corticoides
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Apta para bebés, niños y adultos con piel delicada o atópica
“A mi guagua se le cortaban las mejillas con el frío.
Esta emulsión fue lo único que no le ardió y se le sanó en dos días.
Ahora la uso yo también en los codos y cara.”
— Francisca, 30 años
Para quién es ideal
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Pieles con rosácea, dermatitis, eccema o brotes por frío
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Personas con piel atópica que usan (o quieren dejar) corticoides
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Bebés, niños y adultos que buscan alivio real y seguro
Modo de uso
Aplica una capa delgada sobre la piel limpia, las veces que sea necesario.
Ideal para rostro, manos, mejillas, pliegues, zonas resecas o irritadas.