Alergia solar: ¡más común de lo que crees!

Alergia solar: ¡más común de lo que crees!

Se piensa que alrededor de 1/5 de la población sufre de la alergia solar conocida como Fotodermatosis Polimorfa (EPL). Sus síntomas son incómodos y molestos, dado que tienden a aparecer en zonas muy visibles del cuerpo incluyendo los brazos y el pecho.

La EPL es la fotodermatosis más corriente, un trastorno cutáneo precipitado por la exposición a la radiación UV. Se caracteriza por síntomas recurrentes, de aparición retardada, que se observan uno o más días después de la exposición al sol y puede oscilar entre una erupción leve y un brote de pústulas.

Es común que aparezca en primavera, cuando nuestra piel sufre de hipersensibilidad. Se da fundamentalmente en jóvenes, pues también guarda relación con factores hormonales.

Sus síntomas más comunes son:

  • Enrojecimiento
  • Picazón o dolor
  • Pequeños bultos que pueden convertirse en manchas
  • Descamación, costras o sangrado
  • Ampollas o ronchas

Para su prevención, se recomienda la aplicación de protectores solares en crema, ropa que proteja de los rayos UV y, en algunos casos, incluso de la protección por vía oral. Esto último se refiere a suplementos alimenticios que proporcionan un plus de protección solar. Derivan de los betacarotenos (contenido en la zanahoria, por ejemplo) y modifican la capacidad de la persona de frenar la radiación solar, provocan cambios en la pigmentación piel, aumentan la capacidad de los melanocitos para absorber la luz y evitan que el sol acceda y genere la alergia al sol.

Como en todo, también existen factores de riesgo, que te convierten en alguien más propenso a sufrirlas:

  • Raza. Si bien cualquier persona puede sufrir alergia al sol, existen determinadas alergias al sol que son más frecuentes en personas con piel clara.
  • La exposición a ciertas sustancias. Algunos síntomas de alergia cutánea se desencadenan cuando la piel se expone a una sustancia y luego a la luz del sol. Las sustancias que ocasionan con frecuencia este tipo de reacción son las fragancias, los desinfectantes e incluso algunas sustancias químicas utilizadas en los protectores solares.
  • El consumo de ciertos medicamentos. Algunos medicamentos pueden acelerar el proceso de quemadura solar en la piel — como los antibióticos tetracíclicos, los medicamentos con sulfamidas y los analgésicos tales como el ketoprofeno.
  • Padecer otra enfermedad de la piel. La dermatitis aumenta el riesgo de padecer alergia al sol.
  • Tener familiares consanguíneos que tengan alergia al sol. Eres más propenso a tener alergia al sol si tienes un hermano o padre con alergia al sol.

Por último, te dejamos algunos consejos para minimizar el impacto de los rayos UV en tu piel:

  • Evitar el sol directo, especialmente la exposición intensa entre las 11 de la mañana y las 3 de la tarde.
  • Utilizar productos protectores solares aplicándolos 20 a 30 min. antes de la exposición al sol. Aplicar protector solar FPS 50. Los nuestros son libres de parabenos y derivados del petróleo, para adultos y niños.
  • Mantener a los niños alejados de la exposición solar directa.
  • Considerar los tipos de piel individuales y las implicaciones de cada uno de ellos.
  • Cubrirse con ropas o tocados adecuados.
  • Conocer el impacto de cualquier medicación sobre la tolerabilidad solar.

 

NAÁY