No sólo la contaminación, el sol, y las variaciones en el clima afectan nuestra piel, sino que grandes eventos como una mudanza, preocupaciones o cambios en el trabajo también la estresan. La piel es el primer órgano en reflejar un estrés físico o emocional, es por ello que a continuación te contamos cómo ocurre y qué debes hacer para cuidarla.
Los cambios hormonales, los ingredientes agresivos de los cosméticos tradicionales, así como el trabajo en exceso, dormir poco y llevar una mala alimentación son algunos factores que influyen en nuestro cuerpo, sobretodo en la piel: su órgano más grande. Enfermedades dermatológicas como psoriasis, piel tópica, vitíligo, alopecia, dermatitis, rosácea, acné y muchas otras están asociadas al estrés, y la piel además es el órgano más sensible a estos cambios. Es por ello, que junto a Naay te proponemos útiles consejos para desestresar tu piel ante la influencia de estos factores internos y externos:
– Evita los productos agresivos: ciertos ingredientes de las cremas, lociones y la mayoría de los cosméticos pueden ser muy agresivos con tu piel. Para ello, te proponemos usar productos suaves, hechos para pieles sensibles, y libres de parabenos, derivados del petróleo y químicos que intoxican tu piel. Todos los productos de Naay están hechos para pieles sensibles y se encuentran totalmente libres de estas sustancias tóxicas, además de que están hechos a base de principios activos naturales. VEGAN: OK
– Dale a tu piel el descanso que necesita: mientras dormimos, la piel se renueva y recupera sus funciones naturales. Procura no dormir menos de 7 horas, y antes de acostarte limpia profundamente tu piel con el tónico y gel limpiador facial de Naáy, sus ingredientes activos como el aloe vera, hammamelis, caléndula y pepino refrescarán tu piel del estrés diario y la hidratarán. Luego de la limpieza lo ideal es aplicar un serúm, por su concentración de nutrientes, o una crema de noche, aquí te recomendamos la línea de Resveratrol de Naáy: tienen sérum y crema facial día y noche FPS5. Ambos son potentes antiage gracias a su poder antioxidante, regenerador y desinflamador.