Utilizar un producto efectivo es el primer paso, pero no es el único, es por ello que te lo ponemos fácil y te pasamos un listado de recomendaciones para conseguir una protección ideal:
1. Aplica tu protector solar antes de salir de casa
Para una correcta protección debes aplicarte tu protector solar entre 15 y 20 minutos antes de la exposición al sol.
2. Asegúrate de utilizar suficiente cantidad.
El protector solar debe cubrir de forma efectiva toda la superficie de la piel. No frotes en exceso. Lo importante es que los filtros se queden en tu piel y no solo en las palmas de tus manos. Aplica generosamente, por ejemplo para un adulto en traje de baño de 1,70 m de altura la medida es la de una pelota de golf (2 miligramos por centímetro cuadrado de piel). Algunas estimaciones al respecto afirman que tan solo un 5% de las personas se aplican la cantidad necesaria de crema protectora. Así que ¡mucho ojo!
3. Aplica el protector solar uniformemente ¡No dejes ninguna zona sin proteger!
Solo estarán bien protegidas las zonas cubiertas por el producto.
4. NO frotes tu piel cuando tengas puesto tu protector solar.
Para que la protección solar funcione, debe estar ahí. Si te sientas con las piernas cruzadas, por ejemplo, una buena idea es reaplicar. Si los niños están jugando y frotándose con telas, materiales, muebles etc., es probable que requieran una re-aplicación. Los protectores físicos o minerales son más sensibles a perderse por frotación que los protectores químicos, sin embargo, los protectores químicos pierden efectividad con el paso del tiempo. Por ello...
5. Reaplica cada 2 horas y después de nadar o sudar en exceso
Recuerda que tu protector solar no es resistente al agua. Y es muy importante tomar en cuenta que volver a aplicar la crema no supone aumentar el nivel de protección sino mantenerlo.
6. Conoce tus límites.
El FPS te da una idea muy aproximada de la protección y el tiempo que puedes permanecer bajo la luz solar directa sin embargo las pieles más sensibles deben ser mucho más cautas con los tiempos y horarios de exposición, así como en las re-aplicaciones. Recuerda que cada año el sol quema más nuestra piel.
7. No te expongas al sol entre las 11 y 16 horas.
Es el momento en donde el sol puede provocarte más daño.
8.Evita exponer a los bebés y a los niños pequeños directamente al sol.
Medidas extra
* Usa sombrero y gorra para proteger tu piel del sol.
* Elige gafas de sol que tengan filtro UVA y UVB.
* Mantente hidratado y no olvides que una alimentación equilibrada ayuda a mantener una piel más sana.