Descubre qué es el #MASKNE y cómo controlarlo

Descubre qué es el #MASKNE y cómo controlarlo

El uso de la mascarilla se ha vuelto un imprescindible en nuestras vidas, sin embargo, su uso prolongado ha tenido efectos negativos sobre nuestra piel, presentando irritación, ardor, descamación, pero, sobre todo, significativos brotes de acné.

                                                                                                                                                                

Esto está afectando a muchísimas personas, sobre todo a quienes tienen piel sensible. Tanto así, que ya se acuñó un término en inglés para el fenómeno: Maskne, unión entre “mask” (mascarilla) y “acne” (acné), y llevó a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a emitir un documento que advertía sobre la “posible aparición de lesiones cutáneas” tras el uso prolongado de la mascarilla.

 

¿Qué lo provoca?

La mascarilla produce una obstrucción, que genera un aumento de la temperatura local (nariz-boca), además de humedad. Es así como una mayor sudoración en un espacio con poca ventilación se vuelve el escenario ideal para la proliferación de bacterias, especialmente las que producen el acné. Y a este “microclima” se le suma el factor roce.

 

Lo cierto es que estamos lejos de dejar de usar mascarilla y, por eso, te dejamos 6 recomendaciones para controlar al máximo el Maskne y las irritaciones que puedas llegar a tener:

 

  1. Intenta usar mascarillas de materiales respirables y ojalá de cobre, por su acción bactericida. Si usas mascarilla desechable, procura renovarla con frecuencia.
  1. Evita el maquillaje, al menos en la zona bajo la mascarilla, ya que los poros se tapan y no permiten que la piel respire como corresponde, empeorando las condiciones de este “microclima”.
  1. Al sacarse la mascarilla, hacer la rutina de cuidado diario de la piel; no esperar hasta la noche, sino hacerla en ese momento. Te recomendamos nuestros básicos faciales, elaborados especialmente para pieles sensibles:
  • Gel Limpiador facial que, gracias a sus activos naturales de Aloe Vera, Caléndula y Centella Asiática, regeneran y desinflaman tu piel.
  • Después, aplica nuestro Tónico facial a base de pepino, que te ayudará a cerrar los poros para protegerlos y controlar la sobreproducción de grasa.
  • Exfolia tu rostro dos veces a la semana -sin frotar demasiado-, para remover las células muertas que se producen con la transpiración al usar mascarilla. De esta manera, evitarás que tapen tus poros y tu piel pueda respirar correctamente.
  1. Hidrata con un producto lo más liviano posible y ojalá una vez que estés de vuelta en casa. Para una hidratación ligera, te aconsejamos usar nuestro Elixir multiproteico de Ácido Hialurónico y, en el caso de pieles mixtas a grasas, la recomendación siempre será la crema facial de Bardana.
  1. Recupera tu piel ya dañada con nuestra  Emulsión Recuperadora que, elaborada con Karité, Jojoba, Aloe Vera, avena y palta, reconstituye hasta las pieles más sensibles y dañadas. Desinflama tu piel y calma las irritaciones cutáneas, picores, y sana tu piel. También el Aloe Vera te ayudará a tratar los acné, puedes revisar más sobre esto aquí.
  1. Hidrata tu piel bebiendo mínimo 2 litros de agua al día

 

¡Con estas recomendaciones poco a poco verás cómo tu rostro se siente más liviano y sano!

NAÁY